Respecto del traslado de los boliches de Alem a la escollera Norte, se han estado publicando diferentes opiniones, propuestas y objeciones. Ante los comentarios que realizara un concejal en días pasados sobre la necesidad de realizar un estudio técnico respecto a la capacidad estructural de la escollera norte, el concejal del Frente para la Victoria, ingeniero Carlos Filippini y su equipo de colaboradores realizaron algunos cálculos de interés.

Al respecto Filippini comentó que "no somos conocedores en profundidad de las especificaciones técnicas propias de esta escollera, pero para hacer un análisis previo entendemos que no hacen falta demasiados conocimientos estructurales específicos de la misma. En general puede decirse que una escollera es una estructura que protege a los puertos de las tormentas que vienen desde mar abierto. Su función es destruir la energía del mar para que la misma no pase a la zona portuaria propiamente dicha. Para esto, las estructuras deben poseer el peso suficiente de modo tal que no puedan ser movidas, lo que se logra con piedras y bloques de hormigón".

Consultado respecto de los cálculos que realizaron, manifestó que "supongamos que la escollera sobrepasara en altura unos 10 metros sobre el nivel del mar, y que la profundidad, como mínimo, debe ser un poco mayor a la profundidad del puerto, porque sino podría haber un desmoronamiento hacia el interior que la hiciera colapsar. Pongamos que esta profundidad sea de 10 metros. Entonces 10 metros para abajo, y 10 metros para arriba, hacen aproximadamente 20 metros de espesor de piedras y hormigón. Si la densidad del hormigón es 2.200 kg/m3, resulta que la carga que llega al suelo es de 40.000  Kg/m2 (esto es, 40 toneladas/m2, o 4 kg/cm2)".


Entrando ya propiamente en el tema de la construcción de los boliches y sus estacionamientos, el concejal Filippini aclaró que "para realizar un predio para estacionamiento, según reglamento, se requiere una capacidad de carga de 250 kg/m2. Por tanto, el porcentual de 250 kg/m2 en 40.000 kg/m2 resulta en un incremento del 0,625%, por lo que desde el punto de vista de la ingeniería del lugar, la carga de los autos es totalmente despreciable frente al peso propio de la escollera. Respecto a la posible edificación, podríamos considerar que entre el peso propio de la estructura nueva, posiblemente de dos plantas, mas la carga útil que seria el peso del público en el local bailable, la carga estimada podría ser de 2.000 kg/m2. Haciendo la relación porcentual de estos 2.000 kg/m2 en los 40.000 kg/m2 que tiene de peso la escollera, se estaría incrementando en un 5% la carga que llega al suelo de la escollera." Sin embargo a estos cálculos el ingeniero Filippini agregó un nuevo elemento "en esto no se ha considerado que la superficie superior de la escollera es menor que la base de la misma. Pensemos que en general tiene la forma de un trapecio, o sea el ancho de la superficie es menor al de la base, aproximadamente unos 10 o 15 metros de cada lado.  Con lo cual el aumento de la tensión en el suelo no puede ser superior al 2 o 3% de la carga que hoy soporta el suelo, producido por el peso propio de la escollera".


Como conclusión, dijo el concejal, "entendemos que la opinión vertida pudo haber sido hecha sin ninguna evaluación o idea de lo que una estructura es, y sin aplicar el sentido común de los pesos de las estructura. Para poder hacer un estudio un poco más profundo, es necesario contar con los  planos de la escollera, y a partir de allí hacer un informe con fundamentos concretos. Por consultas realizadas a profesionales especializados en cálculos de estructuras, una tarea de estas características no debe ser muy cara, aunque se trate de un estudio de suelos en el mar".


Y finalizó "si la distribución sugerida por el Plan Estratégico es la ideal, o si existe la posibilidad de ubicar estos servicios en otro sitio, escapa al fondo de este análisis, ya que lo que se ha pretendido analizar son las eventuales razones técnicas que podrían marcar la inviabilidad de la radicación. Y por supuesto, para que las cosas viables sean las mejores tenemos, entre otras, las herramientas de la ingeniería, que nos pueden ayudar a que ambos conceptos sean ciertos en forma simultánea. Tanto el gobierno municipal como el provincial y el nacional están articulando distintas medidas y propuestas para optimizar el uso del puerto marplatense, aplicando las nuevas tecnologías que, en otros lugares del mundo, han permitido que el hombre le gane a la naturaleza, por ejemplo con los muelles flotantes que nos proponen los integrantes de la delegación rusa. Si Mar del Plata cuenta con nuevas tecnologías, herramientas adecuadas y decisión política, el desarrollo del puerto local será una realidad".


Prensa Concejal Carlos Filippini
Dra. Mariana Lalanne