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LAS MONEDERAS TIENEN ESCAPE

¿Qué es lo que ocurre? ¿Otro detalle técnico novedoso de estas obsoletas maquinitas, tan meneadas en los últimos tiempos? Nada de ello, las monederas siguen igual, no solucionando ya más nada y por eso se erradican de todos lados.

El escape (salvo alguna razón no explicitada) es el calificativo que les cabe a la actitud de varios señores Concejales que, desde hace ya dos sesiones de la Comisión de Transportes, no aparecen por la sala y no permiten así que se encuentre el quórum para sesionar.

¿Qué temas se deben tratar? Algunos no demasiados discutibles y otros ligados a las ya famosas monederas. De estos últimos tenemos:


Por un lado un proyecto de ordenanza que autoriza a los señores empresarios a implementar el sistema de “tarjeta inteligente” o “sin contacto”. Ya se ha hablado suficientemente de ello, solo cabe agregar por si alguien no conoce el tema, que las mismas solucionan de la mejor manera (menos el costo del boleto… desgraciadamente), todos los problemas que para el usuario  está comportando el actual régimen, todas las necesidades de información confiable para el control  que puede pretender el poder político y un sinnúmero de servicios adicionales. No aprobar este despacho implica demorar una solución aceptada y aprobada por todo el mundo.

Por el otro, un pedido de la AMETAP solicitando se implemente el cobro de la tarifa del transporte colectivo mediante monederas antes de la temporada estival, y con la modificación del sistema de tarjetas magnéticas por el de contact less (o sin contacto en idioma de Mar del Plata y aledaños).

Por último la solicitud de creación de una Comisión Mixta Consultiva del Trans-porte Público de Pasajeros, iniciativa que apareció después de la reunión de la comisión con el Gremio de UTA, donde se propuso crear esa comisión para discutir, quizás entre otras cosas, este famoso asunto de….¡¡¡ las monederas!!!

¿Por qué no se desean tratar los antecitados temas… si es que ello es así?

¿Qué Concejales no lo desean…. si ello es así?

Conjeturemos:

Los tres concejales del oficialismo podrían decir que, de no hacerse lo que los empresarios del transporte desean, estos pueden “pararles” el transporte colectivo, con el descrédito consiguiente para el Ejecutivo.
No creemos que algo así pueda ser cierto, pero si lo fuera, por alguna circunstancia que se no sabemos, y ese fuera el criterio para “escapar”, podríamos sugerirle unas cuantas cosas, que pasamos a enumerar sin que el orden signifique mérito:

. La comunidad está bastante cansada de los manejos conjuntos (como en otras épocas) de transportistas y poder político.

. Los obreros del transporte se oponen absolutamente al manejo de dinero a bordo.

. Hoy la opinión pública no va a aceptar tener que buscar monedas, que no hay, y correr el riesgo de que no le den el vuelto (sobre todo si se la termina de informar sobre las calidades del nuevo sistema, la facilidad y rapidez de su puesta en marcha, etc.).

. Los señores turistas, que no van a aparecer por ahora para reclamar nada, con las nuevas tarjetas van a poder hacer aquí también cómodamente lo que a partir del primer día del año próximo deberán hacer todos los ciudadanos de la Provincia de Buenos Aires que acudan a hacer trámites a la ciudad de La Plata donde se imple-mentará el sistema de tarjetas inteligentes.

Por tanto, la comunidad toda difícilmente aceptaría la extorsión de los señores transportistas para imponer algo que no tiene ningún motivo razonable. (Indudablemente debe haber motivos no razonables, al menos para los valores comunes y legales).

O sea, si aquella remota e irrazonable posibilidad de mal análisis de la realidad existiera, podríamos decirles a los concejales del oficialismo que no teman. Porque los señores transportistas no deben “comer vidrio” y saben tanto como cualquiera que no están para lock outs (o paros patronales, en idioma de Mar del Plata y aledaños). Por el contrario, sería una lástima que empezara a sospecharse que el Ejecutivo actual puede seguir los pasos de su predecesor.

De los otros dos concejales, no oficialistas, que tampoco han asistido a ninguna de las dos reuniones, si bien conocemos sus posiciones a favor de la prueba de las monederas y de la creación de la comisión, nada tenemos que sugerirles porque son gente con experiencia y saben muy bien lo que hacen.